Adriana Antonia García fue considerada partícipe necesario del delito de administración infiel y condenada, mientras que su esposo, considerado el autor del delito, se mantiene en rebeldía y con pedido de detención.
La Sala II del Tribunal de Juicio, condenó ayer a Adriana Antonia García a la pena de dos años de prisión de ejecución condicional por resultar partícipe necesario del delito de administración infiel, fijando que deberá pagar la suma de $368.200 más los intereses.
En el día de ayer se llevaron a cabo los alegatos en el juicio contra Rogelio Higinio Guaymás, declarado en rebeldía y con pedido de detención, y contra su esposa, Adriana Antonia García. El matrimonio fue acusado por la fiscal penal de Delitos Económicos 1, Mónica Poma por administración infiel. Guaymás se desempeñaba como contador de la empresa Hail & Cotton Argentina y teniendo acceso a las cuentas de dicha empresa, se apoderó de dinero de su empleador para adquirir terrenos, los cuales fueron puestos a nombre de García.
La empresa lo denuncio a Guaymás en 2004 por los desmanejos, lográndose comprobar que fueron realizados desde 2002. Durante las cuatro audiencias llevadas a cabo, la fiscal Poma considero que las pruebas fueron suficientes para acusar a García como partícipe necesario del delito de administración infiel, por lo que solicitó que se condene a la imputada a la pena de 3 años de prisión de ejecución condicional, mientras que la defensa solicitó la absolución por la duda.
El Tribunal compuesto por los jueces María Victoria Quiroga, Ángel Amadeo Longarte y Bernardo Antonio Ruiz, luego de escuchar los alegatos y deliberar por cuatro horas, condenó a García a la pena de dos años de prisión de ejecución condicional y al pago de $368.200 más los intereses desde el momento de denunciado el hecho a la concreción del pago.